CLIMAX: CUANDO LA PROVOCACIÓN SUPERA LA TRAMA

Gaspar Noe ya nos tiene acostumbrados a un nivel de cine muy de autor, en el que siempre va hacer lo que se le de la regalada gana, en este caso “Clímax” definitivamente es más de eso mismo pero no por eso peor.

La película trata de un grupo de bailarines que dentro de una fiesta alguien vierte LSD en la sangría, y todos los que bebieron comienzan a experimentar los efectos de esta droga. Si bien al comienzo puede ser un poco floja, la recomendación es no abandonar la sala hasta pasado los primeros 40 minutos, información para nada gratuita de parte del director ya que eso es lo que demora en que el LSD haga efecto en el cuerpo. Es aquí donde Gaspar Noé nos vuelve a hacer lo que posee como un don… SENTIR. Si hay algo que caracteriza demasiado a este director es su capacidad de invitar al espectador a sentir cosas, sean estas buenas o malas sensaciones.

Su relato, dirección de foto y movimientos de cámara nos están entregando constantemente información sin parar, sobre estímulos que nos hacen olvidar la trama y nos mantienen sintiendo a cada personaje que aparece en la fiesta, abordando la premisa de que no la puedes pasar bien de forma colectiva.

El comienzo es un pequeño descanso para luego no dejar de mostrarte todo lo que no te gusta ver cuando sales a una fiesta, mezclado con todos los estados de ánimo en los que esta droga te puede dejar.

Un diseño sonoro de primer nivel con música tecno sonando toda la película, bailes que poseen mucha intensidad además de retratar una parte importante de lo que se escucha en ese país, gente bailando tectonik, tecno, Vogue, entre otros estilos no muy típicos para nuestra realidad latinoamericana pero muy característicos de Francia actual.

Con un juego tenebrosamente impecable, en donde vemos la oscuridad del ser humano al perder el sentido común con las drogas, te hace sentir que te equivocaste de sala y en vez de ir al cine, entraste al after más escondido y bizarro de tu ciudad.

Da mucho placer saber que distribuidoras como Cinetopia se atrevan a traer este tipo de películas al cine, apostando por un film como “Clímax” que aunque te la cuenten, vivirla es otra cosa. Como todo cine de Gaspar Noé, no te quedes con lo que te dicen y ve directo al cine este 28 de marzo a vivir tú mismo esta experiencia psicodélica.

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