Dirigida por Andy Serkis, la película está asimismo estelarizada por Tom Hardy, Michelle Williams, Naomie Harris y Woody Harrelson en el papel del villano Cletus Kasady/Carnage.
La última vez que vimos a Eddie Brock y Venom, ambos interpretados por Tom Hardy, estos dos habían forjado una tensa alianza. Con el largometraje conocido como Venom, el público se emocionó con este favorito de los fans de los cómics de MARVEL, que por fin aparecía como figura principal en la pantalla grande. La cinta recaudó más de $856 millones de dólares alrededor del mundo a la vez que Eddie, el pertinaz pero egocéntrico reportero, y Venom, el simbionte alienígena que tomó posesión del cuerpo de Eddie, dependían uno del otro para sobrevivir: a Eddie le iba mejor en la vida con el modus operandi de Venom, consistente (literalmente) en devorar o ser devorado, y Venom debía dejarse constreñir por el afinado sentido de justicia moral de Eddie. Ambos sabían que se necesitaban mutuamente… pero no por ello tenían que sentirse a gusto en semejante situación.
“La interpretación de dos distintas partes de una psique es un verdadero placer, Eddie y Venom son una sola entidad para mí”, dice Hardy. “Sólo se diferencian por el hecho de que uno es el monstruo y el otro es Eddie, pero siempre se encuentran dentro de un mismo individuo”.
En efecto, en Venom: Carnage Liberado ese tambaleante matrimonio comienza a desmoronarse. Claro, aún hay puntos buenos… Eddie le ha permitido a Venom devorar las cabezas de los tipos malos, y el simbionte ha puesto todo su corazón en ello, nombrando a esta entidad el Protector Letal y deglutiendo a los villanos en aras de la justicia… y la carrera de Eddie va para arriba: ha obtenido la codiciada última entrevista con el asesino múltiple Cletus Kasady.
Pero, a pesar de todo, siguen enloqueciéndose mutuamente- y sus constantes discusiones no hacen sino escalar hasta convertirse en una batalla frenética mientras ambos intentan descubrir quién está expulsando a quién tanto del apartamento como del cuerpo que comparten. Venom y Eddie han resuelto descubrir si, después de todo, realmente se necesitan.
