El estreno de la tercera temporada de Stranger Things que todos estábamos esperando, no fue sino otra bofetada en la cara por parte de Netflix, en un buen sentido. Literalmente, todo está tan bien organizado, los personajes, la historia, la contextualización de la temática, nos va introduciendo un poco sobre aquello que había quedado pendiente y aquello que está por venir.
No dejo de sorprenderme con el nivel de detalles, la musicalización, el sonido ambiente, los diálogos y por supuesto por el amor. Porque los capítulos estrenos son, generalmente relacionales respecto a la temporalidad y al espacio, pero este en particular, ha tenido la destreza de presentarnos una parte más madura de Dustin, Eleven, Mike, Max, Will y Lucas.
Es en este capítulo que aparecen las primeras señales socioafectivas, contextualizando lo que ha ocurrido durante un año, donde por supuesto, las secuelas de Will, ya lo hacen percibir que algo no anda bien.
En un primer momento, la historia va tomando forma cuando los chicos aparecen, vemos la maduración del romance entre Eleven y Mike, Nancy y Jonathan, la magistral actuación de Winona Ryder como Joyce, porque nos encanta verla en pantalla y los desafíos de Hopper sobre cómo ser padre, etc. En general el contexto va en orden a lo que nos dejó la segunda temporada.
Lo que impresiona ahora, es que, gracias a la ciencia y tecnología, sería posible re contactar con este universo paralelo, efectos secundarios que por el momento sólo percibe Will, pero que evidentemente se irán desarrollando hasta desatar una catástrofe, como estamos acostumbrados a que suceda. En general, nada es muy nuevo para nosotros como espectadores, sin embargo, hay otros actores que van tomando protagonismo en este primer capítulo, y las historias toman rumbos inesperados, al mismo tiempo que el relato nos acerca a la oscuridad nuevamente, a los efectos especiales y a la producción audiovisual de una calidad alucinante.
Lo que nos queda ahora es continuar con la historia para ir entendiendo el propósito que los hermanos Duffer y Netflix han creado para esta nueva temporada, que sin duda nos dejará con la boca abierta. ¡No esperes más y corre a verla!
