‘Ringu’ en su título original japonés, fue una cinta que pasó a la historia del cine de terror con la tenebrosa ‘Sadako’ o ‘Samara’ en su versión estadounidense. Una de las mejores villanas del cine de terror a mi juicio personal. Su historia es potente, su estética es simple y terrorífica pero lo mejor de todo es su forma de asesinar. Realmente, ‘Samara’ o ‘Sadako’ no es un personaje que pase desapercibido en la historia del cine de terror.
La historia que llega al cine chileno este jueves, es la línea de la historia japonesa: ‘Ringu’, la versión original del remake ‘The Ring’ (que en latinoamérica llegó como ‘El Aro’) protagonizada por Naomi Watts. Así es que nada de inglés y rubiedad acá, solo japonés y cabelleras hermosamente lacias, brillantes y negras.
Estamos en la sexta y supuestamente última entrega de la saga japonesa. ¿Nos atemorizará tanto como la primera? Como es de esperar y quienes vieron algunas de las versiones posteriores a la película original, en general las secuelas no alcanzan el nivel de la cinta que las precede. Claro, la sorpresa ya no está, la originalidad tampoco y muchas veces la historia parece ser más simple. Sin embargo, eso no quiere decir que no nos entretenga o que no nos haga pasar un buen rato ¿verdad? Y es que eso es exactamente lo que sucede con ‘El Aro 6’. Es decir ¡es la sexta entrega! Imposible recibir lo mismo que hace 20 años atrás. Aquí la historia se centra en la psicóloga clínica Mayu, quien comienza a atender a una misteriosa niña que no recuerda siquiera quién es. Mayu se da cuenta de que la niña tiene ciertas características extrañas que nunca había visto antes y con el tiempo comienza a sospechar de algún tipo de fuerza sobrenatural sobre ella. Mientras, conocemos al hermano de Mayu: Kazuma, un youtuber que en su desesperación por recuperar seguidores, comienza a indagar en el mundo del terror y entra a un edificio recientemente incendiado para grabar nuevo material, encontrando imágenes terroríficas.
‘El Aro: Capítulo Final’ cumple su objetivo. Genera momentos de tensión, algunos saltos por aquí y por allá y Sadako aparece como siempre, hermosamente terrorífica. Sin embargo lo que tenemos que tener muy claro es que no encontraremos nada nuevo. Incluso hay ciertas reglas de cómo funciona la maldición de Sadako que en realidad es como si no existieran y pasan por sobre ellas sin ningún reparo. Pero como dije antes, nada de esto impide que la cinta nos genere un buen rato (o en este caso, un terrorífico rato). El intento de actualizar la historia trayendo a este personaje youtuber y la -quizás- crítica que se hace de los riesgos que muchas veces toman las personas que viven de sus publicaciones y likes solo para conseguir mayor popularidad, es interesante y se agradece. El personaje de Kazuma es entretenido y su canal de youtube es en realidad, tremendamente ridículo dejando en evidencia que muchas veces lo que consumimos a través de internet es material vacío que no aporta en nada.
Finalmente, la última entrega de ‘El Aro’ es lo que es: una cinta para disfrutar, sin mayor expectativas que nos hará recordar a la terrorífica niña de pelo largo que tanto miedo nos causó en el pasado.
